Referencia a uno de los asesinatos cometidos por los marxistas en Llerena
(Boletín Oficial de la Provincia de Badajoz, 27-diciembre-1937)
Comenzamos la transcripción de algunos capítulos del libro Extremadura bajo la influencia soviética, publicado en 1937 por Rodrigo González Ortín. Apenas conocida conocida fuera de los círculos de especialistas, es una obra que merecería reeditarse sin olvidar su verdadera naturaleza: un escrito bajo la impresión de los sucesos y redactado de manera muy temprana con una intencionalidad al mismo tiempo testimonial y propagandística
III.- La heroica defensa de Llerena en el contraataque
Primera
ciudad que visito de tierras extremeñas, que con justo orgullo llaman
de la pluma y de la espada. En Extremadura nacieron, entre otras
glorias, Carolina Coronado, Arias Montano y Espronceda, Hernán Cortés y
Pizarro, no faltando el sabio pincel de Zurbarán.
Anotando en cada pueblo solo aquellos datos que puedan ser de utilidad a los lectores, dejemos para nueva ocasión el Folklore, ya que no creo pueda ser de interés el saber que entre los juegos de entretenimiento en algunos pueblos para las niñas son el corro, al alimón, la comba, etc.y para los niños el repión, bilarda o el jincote. Esta ciudad es cabeza de partido judicial, con unos 10.000 habitantes, plaza fuerte y una de las principales poblaciones de la provincia de Badajoz; sus producciones principales son: cereales, garbanzos, aceite, miel y ganadería, minas de plata (hoy casi agotadas), tejidos, aguardientes y cervezas.
El partido tiene 18 Ayuntamientos con 76.000 habitantes, a 111 kilómetros de Badajoz, estación férrea en la línea de Mérida a Sevilla y carretera de Ventas de Culebrín a Castuera. Las antiguas murallas acreditan la importancia estratégica que tuvo en otros tiempos.Con respecto a organización de Falange, existe enclavada la Jefatura comarcal número 9.
Informado de los sucesos con motivo de la dominación roja, en esta ciudad fueron detenidas durante la misma (veintiocho días) 63 personas por el solo hecho de pertenecer a las clases de orden o tener creencias cristianas; entre ellas se encontraban el actual jefe comarcal, joven Teniente de ferrocarriles, camarada Julio Burgueño Cortés, el secretario comarcal Teodoro Hernández Ronquillo, jefe local Ángel Seco Guerrero, don Celestino Rebollo Gómez (capellán de Falange), don Alberto Zambrano (Arcipreste) don Antonio Peña de las Peñas (farmacéutico y abogado), don Miguel del Barco Manzón (maestro nacional), don Aurelio Rincón Fernández (abogado), don Francisco Cuellar Montaño (maestro nacional) y la señorita Micaela Burgueño Cortés (hermana del jefe comarcal). El trato que recibieron durante su prisión no fue muy malo del todo, si bien a los familiares les hacían sufrir de manera extraordinaria, hasta el punto de que el último día de prisión los guardianes rojos de la cárcel les hacían volver con las comidas que les llevaran, haciéndoles indicación ser síntoma de una segura muerte.
El día 5 de agosto, a las ocho de la mañana se inició el tiroteo por las fuerzas salvadores que se aproximaron a conquistar el pueblo y libertar a los presos. Viendo los rojos que las tropas se acercaban, resolvieron incendiar la cárcel para que perecieran los encarcelados, a cuyo efecto llevaron a dicho edificio varios bidones con gasolina; pero no creyendo suficiente cantidad, al llevar dos bidones más, el portador de los mismos fue muerto en el mismo portal de la prisión por el fuego de dos ametralladoras que a tal efecto dispararon, impidiéndose con este motivo el criminal propósito. A las doce del día el Teniente de la Guardia Civil, don Antonio Miranda, iniciador en la preparación de la toma del pueblo, acompañado del jefe provincial de Badajoz, camarada Arcadio Carrasco, llegaron a las puertas de la prisión dando libertad a todos.
El
día 31 de agosto podemos decir se vistió de orgullo y heroísmo una
página de nuestra historia con la defensa efectuada en el contraataque
por una centuria de Falange, una compañía del Regimiento de Granada
número 6, al mando del Capitán Carrión y Guardia Civil en número de diez
o doce al mando del citado teniente Miranda, que de manera brillante y
valentía sin límites dieron una lección sin precedentes a la columna
que atacó compuesta de 3.000 hombres al mando del capitán Sediles
aportando ametralladoras, morteros, cañones y tanques, de los que quedó
uno en nuestro poder; la descubierta de la repetida columna roja la
efectuaban dos aeroplanos rojos. Es digno de reflejar la gesta heroica
del nunca bien llorado llerenense camarada Rogelio Delgado Á1varez que
al hacer la retirada observó que ondeaba a bandera roja colocada en una
caseta de la Estación del ferrocarril. Con la valentía característica
del falangista y emoción patriótica, ciego al peligro inminente, se
volvió, dirigiéndose hacia la caseta sin obedecer su entusiasmo la voz
de sus superiores, consiguiendo arrancar la roja bandera; mas al pisarla
sobre el sueldo, el disparo de varios rojos parapetados le produjeron
la muerte tan honrosa como ejemplar.
En esta ciudad, como principales edificios religiosos, se encuentran la parroquia (La Granada); es de estilo plateresco, construida según el modelo de la Giralda, hoy casi destruida por el salvaje proceder rojo.
Entre las joyas que se han perdido en la quema de la citada iglesia se encontraba la patrona de la ciudad (Virgen de la Granada), de talla en madera del siglo XII; estaba representada por la Virgen María sentada en un trono de madera, medía aproximadamente unos 90 centímetros, imagen muy venerada por todos los llerenenses.
La principal joya de la que aún se conservan vestigios es la Santísima Trinidad, grupo escultórico en mármol de 1’35 de altura; es del siglo XIII, su estilo románico; ha figurado en las Exposiciones de Sevilla, Fregenal de la Sierra y Barcelona; sólo hay dos de este estilo: una en Madrid y la de esta población, hoy destrozada por las hordas marxistas.
Dirigentes rojos
Muchos
son los dirigentes de verdadero instinto criminal que sufrió este
pueblo; citemos solo al tristemente célebre Maltrana ya que éste por su
proceder y conducta canallesca consiguió popularidad, no solo en todo
este distrito, sino en casi toda España. Rafael Maltrana Galán, solo su
repugnante tipo, era suficientemente para comprender sus instintos; es
de cuello y nariz exageradamente largos y delgados, de filiación
socialista; fue presidente del Sindicato y alcalde al proclamarse la
República, y durante el primer bienio, hubo de observar durante su
actuación una conducta desastrosa e inmoral; durante el movimiento
desempeñaba el cargo de militar con la jerarquía de alférez, jefe de
milicias roías; actuó con el procedimiento más criminal que pudiera
describirse; se jactaba de ser jefe de martirio y asesinato.
Valiéndose de un coche que tenía a su disposición, se dedicaba a ir a
todos los pueblos y sacar de las cárceles a los presos para asesinarlos;
iba siempre acompañado de su escolta especial, elegida por él y
compuesta por varios rojos escogidos entre los más criminales de
aquellos contornos.
*
Ni
posible ni justo sería despedirse de Llerena sin decir algunas
palabras de la organización de Falange Femenina y de la personalidad de
su jefe; es imposible hacer un juicio exacto de sus méritos, pero
digamos sólo que Manolita Román es ejemplaridad de la Falange Femenina.
Unos minutos de charla con esta jefe local son suficientes para
acrecentar el espíritu nacionalsindicalista al más incomprensivo, y para
convertir al más pusilánime en decidido batallador. La interpretación
más fiel y exacta que esta joven haya concebido del momento trágico
español, bien pudiera ser un manantial de virtudes, de cuyas puras
aguas, llenas de patriotismo y bondad, se acercaran a beber aquellos
necesitados, más llamados a salir de las comodidades de sus hogares,
donde apoltronados esperan el final feliz de este derrotero
nacionalista que nos conduce a la España nueva. Con el ejemplo de esta
Jefatura local extremeña, estará muy próximo patentizado el fin
espiritual de los propósitos de nuestros postulados. Manolita Román, en
el desempeño de su cargo, bien pronto ha conseguido la popularidad
entre los llerenenses; sus cualidades bondadosas y sus desvelos por las
obras caritativas le han hecho acreedora al cariño y admiración de los
humildes y de cuantos le tratan; esta Falange, con la integridad de su
centuria de afiliadas, de cuyas cualidades nada resta decir, sí solo
que son seguidoras del ejemplo de su jefe, con la disciplina por
placer, la bondad por orgullo y el patriotismo por norma, abandonan los
quehaceres necesarios y los más anhelados deleites de su juventud para
entregarse de lleno al servicio de su patria, con la tarea constante al
cuido del heroico soldado español, que con el desprendimiento generoso
de sus vidas pugnan por regenerar a España. Yo, por mi parte, me
felicito de haber encontrado en mi ruta informativa una organización
modelo, que gritará conmigo, brazo en alto, con un ¡¡Arriba España!!,
asomando a sus labios una sonrisa de heroína triunfadora.
Tomado de: González Ortín, Rodrigo, Extremadura bajo la influencia soviética, Tip.Gráfica Corporativa, Badajoz, 1937, pp.41-47